Al igual que la Tierra, estamos en proceso de transformación. Estamos experimentando nosotros mismo y aunque no sea todo el tiempo en algunas ocasiones sentimos ciertos síntomas.
Estamos más cansados, más estresados, más inseguro e irritables, o simplemente de mal humor, y todo ello, a causa de los flujos de energía que se mueven a nuestro alrededor, todo está cambiando constantemente.
Imagina que se trata de un río, en el que la corriente es cada vez más fuerte y llega un momento en que la corriente es tan fuerte que ya casi no se puede volver nadando. Tan sólo tenemos que dejarnos llevar por la corriente y seguir con ella hacia adelante. Si oponemos resistencia, estaremos bloqueando esa energía hacia nuestro crecimiento personal, nos estamos cerrando en todo sentido.
No luches contra esa corriente principal de energía. Simplemente, ríndete a ella y permite que tus sentimientos y emociones te guíen por el camino correcto.
Recuerda que estas energías de la Tierra son a causa de los nuevos cambios que vivimos hoy día y que cada vez son más fuertes y frecuentes.
¡Sólo déjate llevar y abre tus sentidos, te ayudarán!